Bodas de Isabel de Segura

Sin duda, nada tiene que envidiar esta historia de amor a la mundialmente conocida de Romeo y Julieta. Por eso, durante el fin de semana más próximo al 14 de febrero, la historia de los Amantes de Teruel, convierten a la ciudad turolense, en la «Ciudad del Amor».

Un poco de historia

Dos jóvenes turolenses, Juan Martinez de Marcilla, más conocido como Diego de Marcilla, e Isabel Segura, están profundamente enamorados. Tal es su amor, que deciden casarse. Sin embargo, el padre de Isabel no acepta tal compromiso, por no ser el marido rico que esperaba para su hija. Por ello, Diego se marcha en busca de riqueza durante cinco años, y así, casarse con su amada.
Pasados cinco años, el padre de Isabel le dice que debe casarse. Aunque ella prometió esperar a Diego, no sabía nada de él, así pues, finalmente acepta el compromiso. Tras la boda, Diego vuelve a la ciudad lleno de riquezas, tras cinco años de batallas. Sin embargo, es demasiado tarde ya que Isabel está desposada. Con el fin de encontrar una explicación, Diego se esconde en los aposentos de Isabel, pidiéndole un beso: «Bésame que me muero» Sin embargo, ella no acepta, y ante tal negación, Diego cae muerto.
Cuando llevan a enterrar al joven, aparece Isabel y «le da en muerte el beso que le había negado en vida». Tal fue la fuerza del beso, que Isabel cae muerta sobre su amado. Ante este suceso, fueron enterrados juntos en la iglesia de San Pedro, donde actualmente se encuentran.

Que hacer en la ciudad medieval

Por supuesto, durante vuestra visita a Teruel, además de vivir el ambiente del siglo XIII, no os podéis perder todos los lugares de interés de los que os hablamos en el post «Que ver en Teruel». Durante estos días, la ciudad revive las Bodas de Isabel de Segura, con Pedro de Azagra, la posterior llegada de Diego y la muerte de los Amantes, Diego e Isabel. En vuestra visita a la capital turolense, podréis pasearos por las variadas tiendas del medievo, ver actuaciones de caballeros y poder disfrutar de un gran número de espectaculos. Mas de 150 haymas formadas por grupos turolenses, convierten la ciudad en la Teruel medieval.

En los jardines de la Escalinata, encontrareis tiendas medievales y el campamento de los almogavares, un campamento militar de la época. Allí, podréis ver representaciones de batallas, o como vivían los guerreros.

Por el centro de la ciudad, podréis encontrar haymas culturales de todo tipo: exposición de aves, burros, esquilar ovejas o atracciones para los mas pequeños. Si además tenéis la oportunidad, os recomendamos que vayáis vestidos de la época. No os preocupéis porque no desentonaréis.

Representación

Sin duda, el plato fuerte es la representación de todos los sucesos relativos a la historia de las Bodas de Isabel de Segura. El jueves comienza con el Destino de Isabel, donde interpretan los antecedentes a la boda, la cual se celebra el viernes. Tras la boda, se realiza el pregón y el posterior baile.
El sábado, hay multitud de actividades, que podréis encontrar en el PROGRAMA, pero no os podéis perder a las 20:00, la llegada de las tropas de Aragón, donde se encuentra Diego de Marcilla. Tras ir a ver a sus padres, acude a la casa de Isabel para la petición del beso y su posterior muerte. Estos actos siguen un recorrido desde la portal de Daroca (plaza del Seminario), al balcón del Ayuntamiento, para terminar en la plaza del Torico.

Recomendamos que si queréis ver bien la representación del beso, lleguéis con antelación a la plaza, ya que se llena por completo. Además, la espera se hace muy amena, ya que distintas compañías de interpretación y parte del reparto de la obra, realizan distintas actividades en la plaza.
Ya el domingo, a las 11:45 comienza la comitiva del entierro de Diego, teniendo dos puntos importantes para ver. El primero, en la plaza del Torico donde se canta la «Oda a la novia» y el segundo en la plaza de la Catedral, donde se produce el beso y muerte de Isabel. A las 13:00, finaliza la representación con la Oda a los Amantes y el beso. En ese momento, todos los presentes en la plaza deben darse un beso con sus parejas, en honor a los Amantes de Teruel.