La laberíntica y caótica medina de Fez, comprende la zona más antigua de la ciudad. Nuestro segundo día en Fez, lo dedicamos a conocer todos sus zocos acompañados de nuestro guía que nos dió la visión local que de otra forma nos hubiera resultado imposible conocer. Y ahora, nosotros os lo contamos a vosotros. ¿Nos acompañáis?
Recorrer las calles de la medina de Fez es como viajar en el tiempo. El trazado de estas calles no ha cambiado en casi un milenio y actualmente, unas 156000 personas viven entre estos callejones sin salida y zocos escondidos.
Sumergirte en estas callejuelas es toda una odisea, porque con toda seguridad, acabarás desorientado por ellas.
Unas nociones básicas para orientaros es que a mano izquierda según se entra se halla Talaa Kebira (gran cuesta), y a mano derecha, Talaa Seghira (pequeña cuesta). De estas dos calles principales, parten una gran multitud de callejuelas en las que perderéis la noción del tiempo.
La medina cuenta con algunos puntos de interés, sin embargo, estos lugares solo constituyen una pequeña parte del encanto de la medina. Merece la pena lanzarse a explorar para descubrir los encantos más inesperados de Fez.
Nuestra recomendación es que descubráis la medina acompañados de un guía local (¡¡cuidado con los falsos guías que se os ofrecerán en la calle!!). De esta forma conoceréis la vida de los marroquis en estas calles y os contará multitud de curiosidades que desconocíais.
Cuando acabéis vuestra visita guiada por la medina, os recomendamos dejar el mapa a un lado, y perderos vosotros solos por sus calles. Llevaros dinero y vuestras dotes de regateo porque no seréis capaces de pasar por sus zocos sin hacer ninguna compra..:)
¿Comenzamos con nuestra visita guiada?
Ruta por la medina de Fez:
Quedamos con nuestro guía Moha, que nos iba a acompañar por la medina de la ciudad durante las siguientes 3 horas. Vino a buscarnos al riad donde nos alojamos bien temprano, y cuando salimos a la calle principal de la medina ya vemos el gran movimiento que hay a horas tan tempranas.
Nos gusta madrugar en nuestros viajes. De esta forma pudimos ver la medina con la vida diaria en sus callejuelas, sin apenas turistas. Comenzamos a caminar calle arriba y calle abajo, cruzándonos con estampas tan curiosas como esta.
Gallinas en jaulas en medio del mercado, y mercaderes vendiendo huevos o el animal directamente. A gusto del consumidor.
Zoco Nejjarine
Llegamos al primer zoco llamado zoco Nejjarine, o para que nos entendamos, el zoco de la madera. En sus calles, como podréis imaginar, encontraréis artesanos carpinteros tallando distintos muebles.
Sin embargo, lo que más nos llamó la atención, fueron algunos puestos donde se vendían tronos hechos a mano, para las bodas marroquíes.
En este mismo zoco, hay un lugar interesante que podéis visitar. Se trata del museo Nejjarine de Arte y Artesanía de la Madera. El museo alberga distintas salas alrededor de un patio con distintos objetos tradicionales.
Aunque no tengáis pensado visitar el museo, podéis acercaros a la zona e incluso asomaros a su patio.
Cuando vayáis paseando por la ciudad, veréis una fuente casi al doblar cada esquina. Como curiosidad deciros que hay más de 60 fuentes públicas a lo largo de toda la medina. Algunas de ellas son hermosas, pero la fuente pública que destaca entre el resto es la fuente an-Nejjarina, al lado del museo que lleva el mismo nombre.
Continuamos paseando entre las callejuelas y nuestro guía se volvió a detener frente a una puerta de una vivienda. Nosotros extrañados le preguntamos el motivo. La razón era un símbolo que está en prácticamente todas las puertas de las viviendas marroquíes.
¿Lo reconocéis verdad?
Efectivamente, se trata de la mano de Fátima. Para quien no conozca su significado, este símbolo es un talismán en el mundo árabe que protege de la desgracia y del mal de ojo y atrae la buena suerte. Por esta razón, desde hace muchos años, los musulmanes tienen la tradición de plasmar en sus puertas este símbolo, para atraer la buena suerte al hogar.
Continuamos nuestro camino, y nos dirigimos a uno de los lugares más típicos de Fez.
Curtidurías de Chauwara
Seguro que si escribes «Fez» en Google la imagen que os aparecerá mayoritariamente, será la de este lugar. Se trata de las Curtidurías de Chauwara.
Cada tienda tiene una terraza que permite al forastero observar la actividad de los curtidores en proceso del tinte y del secado del cuero. Los vendedores, estarán encantados de proporcionaros una explicación de todo el proceso a cambio de una pequeña propina a cambio, o todavía mejor, una venta.
Se recomienda llegar por la mañana, cuando los pozos están repletos de tintes de colores. Y por los olores no os preocupéis demasiado, el vendedor os proporcionará una ramillete de menta a la entrada, para que estos olores tan insoportables no os amarguen la visita.
Continuamos paseando por las callejuelas de la medina. Lo bueno de ir con nuestro guía es que por algunos de los lugares que nos llevó, nos sentíamos uno más. Libres de turistas y en las zonas más tradicionales.
Si poco antes habíamos visto algún comerciante vendiendo tronos de bodas, esta vez, pasamos por una calle repleta de puestos vendiendo vestidos de novias y trajes de novios.
Madraza Rascherratine
A pocos metros caminando, llegamos a la madraza Rascherratine. En esta madraza es donde nuestro guía nos dio una muy buena explicación de la forma de vivir de los musulmanes en su día a día, con sus costumbres y sus rezos diarios. Muy interesante porque descubrimos algunas cosas que nosotros desconocíamos por completo y como en todos los viajes, nos gusta adentrarnos en la forma de vivir de los habitantes y no solo los lugares más turísticos.
Incluso Moha, nos mostró la forma de rezar y la rutina que se debe seguir en cada rezo. De verdad que fue muy interesante.
Zoco Attarine
Llegamos a uno de los mercados más antiguos de la ciudad. Se trata del zoco Attarine, una serie de callejuelas cubiertas donde el olor a especias se mezcla entre el bullicio de la gente.
No sabemos si será por que este zoco es de los más famosos de la medina o porque ya se estaba haciendo tarde, pero ya se empezaba a notar más aglomeración de gente.
El olor a las especias pronto se empieza a mezclar con el sonido de los artesanos martillando el cobre.
Plaza Seffarine
Llegamos a la plaza Seffarine. En este lugar es donde podemos observar a artesanos llevando a cabo uno de los oficios más antiguos de Fez, y trabajando ollas y cuencos de cobre.
¿Veis en la foto lo que os decíamos no? Las horas ya se notaban en la cantidad de turistas que abarrotaban las calles…
Universidad Kairauine
Uno de los atractivos turísticos de la ciudad se encuentra muy próximo a esta plaza. Se trata de la mezquita y universidad Kairauine.
Muchas son las universidad del mundo con una fama indiscutible, pero ¿sabéis que? Estáis ante la universidad más antigua del mundo y el centro espiritual de Fez e incluso de todo Marruecos.
Imaginaros el tamaño del complejo que puede albergar hasta a 20.000 personas durante la oración.
Sin embargo, como en todas las mezquitas de Marruecos, nosotros no tenemos permitida la entrada. Así pues, nos tendremos que conformar con ver el patio desde la puerta de entrada.
Fijaros en la techumbre de la entrada. Es impresionante!
¿Cual pensáis que es uno de las compras típicas en Marruecos? La verdad que es una pregunta complicada. Marruecos se caracteriza por bastantes productos estrella: el cuero, la artesanía, las especias… y las alfombras!!
Así pues, Moha nos llevó a una tienda especializada en alfombras. Un espacio enorme envuelto en alfombras. Pero lo que más nos gustó de este lugar es poder acceder a la parte trasera de la tienda. Allí, una trabajadora estaba tejiendo en ese momento una alfombra. Menudo trabajazo!! No nos extraña el precio al que se venden…
Mausoleo de Mulay Idrís
Moha nos dirige al siguiente punto turístico muy importante para los musulmanes en la ciudad. Se trata del mausoleo de Mulay Idrís.
Mulay Idrís era el patrón de la ciudad de Fez, por lo que se trata del santo más venerado de todo el país. Es por esta razón por la que miles de musulmanes visitan este lugar para obtener su bendición, en forma de peregrinación.
Os dejamos algunas fotos de este lugar porque es impresionante.
En este punto finalizamos nuestra visita por la medina de Fez. Moha nos acompañó de nuevo a nuestro riad.
Tras una riquísima comida marroquí (ver post datos prácticos), dedicamos la tarde a hacer compras de todo tipo: tés, especias, decoración,… Ya os dije al principio que salierais con vuestras técnicas de regateo porque os querréis comprar todo!!
Finaliza nuestro viaje a Fez. Ha sido una escapada muy rápida. Por esta razón, no nos ha dado tiempo para descubrir todo lo que queríamos visitar del país. Nos hubiera encantado ir a Marrakech y al desierto. Pero no disponíamos de tantos días… Nuestro gusanillo de visitar Marruecos nos lo habíamos quitado. Aunque a decir verdad, todavía nos hemos quedado con más ganas de continuar descubriendo este país.
Así que no podemos terminar de otra forma, mas que diciendo:
CONTINUARÁ…