Museo del Louvre

El  Louvre es uno de los museos mas importantes del mundo, con mas de 8 millones de visitantes cada año. Entre sus obras, podemos encontrar cuadros de extraordinario valor como la Gioconda o esculturas tan importantes como la Venus de Milo. Por eso, si vas a visitar la capital parisina, aquí tienes nuestros consejos para hacer de tu visita al Louvre, una experiencia única.

Ubicado a orillas del Sena, el museo se encuentra en el antiguo Palacio del Louvre, una antigua fortaleza del siglo XII que fue ampliada hasta ser residencia real. Tras la marcha de los reyes a Versalles, este palacio comenzó a albergar distintos cuadros, para convertirse en un museo.
No fue hasta 1989 cuando se construyó en el centro de la plaza la pirámide de cristal, famosa por ser nombrada en libros como el Código Da Vinci. En la actualidad sirve como entrada principal al museo.

piramide

¡¡CONSEJO!! Si queréis entrar al museo de forma rápida y sin aglomeraciones, os aconsejamos llegar a primera hora del día, ya que se pueden formar filas de largas horas, como la que vimos en nuestra visita durante el día gratuito.

Aquí os dejamos el horario del museo, y si queréis mas información podéis entrar en Museo del Louvre.

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Si entramos por la entrada principal de la Pirámide de Cristal, encontraremos las taquillas y puntos de información. Pero además, este hall circular sirve como referencia para empezar la visita. El museo se divide en 3 alas: Denon, Sully y Richelieu. Os dejamos el plano del museo:

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Una vez comprados los tickets, tomando el ala Sully, se llega a los fosos medievales del museo del Louvre. Estos cimientos originales de la primera construcción del siglo XII se encuentran restaurados y conservados en el subsuelo. Ademas, en esta zona se encuentran distintas obras que acompañan a esta estructura. Una de ellas es una replica de la famosa Esfinge.

subterraneo

esfinge

Volviendo al hall central, y siguiendo en el subsuelo -1, os recomendamos tomar la salida hacia el ala Richalieu. Aquí llegaréis al patio Marly, donde veréis una bóveda de cristal que cubre el techo, dándole a la sala una luz natural que realza el conjunto de esculturas que componen el patio.

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Tras un paseo por este hermoso patio, se sube a la planta 0, donde se encuentran las esculturas de origen francés, de los siglos V a XIX. Continuando, se llega a la zona de Mesopotamia dando la bienvenida las figuras del Toro Alado. Estas imponentes figuras, con cabeza de humano, y cuerpo de caballo con alas, alcanzan los 3 metros de altura, y sus dimensiones así como el estado de conservación te sorprenderán.

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Antes de abandonar Mesopotamia, no os podéis perder la primera obra de gran valor que vais a ver en el Louvre: el código de Hammurabi, el cual tiene inscrito la Ley Talion, un conjunto de leyes de la antigua mesopotamia. A lo largo del pasillo, se llega a la zona egipcia. La colección egipcia no es tan grande como en otro museos como el Bristih Museum, pero aun así tiene piezas de enorme valor como varios sarcófagos muy bien conservados. Encontramos también la joya de la colección, el escriba sentado, una de las esculturas mas representativas del antiguo Egipto y que se conserva de manera muy notable.

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Al término de la parte egipcia, se llega a las esculturas de la antigua Grecia. Dos enormes salas, repletas de esculturas, y con paredes de mármol. Paseando entre las esculturas, al final de estas salas, se llega a la zona donde se encuentra una de las piezas mas codiciadas del museo, la Venus de Milo. Pero no es la única escultura importante en esta zona, ya que podréis encontrar también las esculturas de Dafne y Apolo y el esclavo moribundo, de Da Vinci.

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estatua
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Subiendo a la primera planta, se encuentra la zona de pintura española e italiana de los siglos XVI hasta XIX, pero cuando fuimos estaba cerrado por restauración, así que no podemos enseñaros mas de esa zona. A pesar de las reformas, esta planta es la mas importante y su visita es imprescindible. Al subir por las escaleras, se llega a la Galería de Apolo. Llama la atención esta enorme sala por su techumbre dorada, en la cual hay doce figuras que representan los signos del zodiaco con el nombre del mes al que representan.

diciembre
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Cerca de la galería, llegareis a una sala especial, donde al entrar notareis como la temperatura disminuye, el ambiente se enrarece y la multitud se agrupa en un mismo punto. En esta sala, se encuentra la Gioconda de Leonardo da Vinci. Es realmente difícil conseguir una buena fotografía ya que el cuadro se encuentra rodeado por un cordel a más de tres metros de distancia y está protegido por un grueso cristal. Pero por intentarlo que no quede…

giocconda

Para completar el recorrido de la planta 0, recorreremos la pintura francesa de los siglos XVIII y XIX, donde predominan por encima de todos, dos de los cuadros mas importantes de la historia francesa: La libertad guiando al pueblo y la Coronación de Napoleón.

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Al otro lado de esta planta, se puede visitar lo que fue el apartamento de Napoleón III. Esta apartamento, nada tiene que envidiar a un palacio ya que es impresionante el lujo y el brillo que resalta en las diferentes habitaciones, ya sea el comedor o el dormitorio. Sin duda, es algo que no te esperas encontrar en un museo, pero que merece mucho la pena dedicarle un rato de vuestra visita.

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En el piso mas alto del museo, se concentra la pintura de los Países Bajos y Alemania, de los siglos XV a XVII. Entre las muchas obras que contiene esta área, nos llamo especialmente la atención el cuadro de Gabrielle D´Estrèes y su hermana, por lo singular y llamativo del cuadro.

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Con esta visita, que aproximadamente duraría entre 2 a 3 horas, podéis visitar las obras mas importantes de este increíble museo. Pero os recomendamos si tenéis tiempo, que dediquéis más tiempo y contempléis todas las obras que la componen, porque hay piezas de un gran valor histórico y artístico.

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