
Llevamos una larga noche sobre las espaldas. Un viaje en bus Zaragoza-Barcelona, coger otro bus que nos dejará en el aeropuerto, hacer tiempo hasta las 6.50 que sale nuestro avión y coger un último autobús hasta el centro de Roma. Menos mal que somos de sueño fácil y hemos conseguido cerrar un rato los ojos. Por fin estamos allí y después de dejar todo el equipaje en el hostal (información del hostal en datos prácticos), llega el momento de empezar a descubrir la ciudad eterna. Comienza nuestro viaje a Roma!!
Comenzamos nuestro recorrido por Roma atravesando el parque de Vittorio Emanuele hasta llegar a la Basilica Santa Maria Maggiore. Se trata de una de las cuatro mayores basílicas de Roma, construida en el 360 por orden del Papa Liberio. En su interior, se encuentra la tumba del Papa Pio V, de Bernini y una reliquia del pesebre.
Continuamos hacia la Basilica San Pietro in Vincoli, o su traducción al castellano San Pedro encadenado, llamada así ya que en su interior se encuentran las cadenas que llevó San Pedro. Pero sin duda, esta iglesia destaca por el Moisés de Miguel Ángel. Este monumento funerario en honor al Papa Julio II, iba a estar compuesto por un total de 47 estatuas, pero al final el numero fue mas reducido y su eje central, el Moisés, esta considerado una de las obras maestras de la escultura.
Se acerca la hora de comer, y paseando por las calles llegamos hasta el parque de Carlo Alberto Quirinale donde aprovechamos para comernos nuestros bocatas. Junto al parque, la Piazza y Palacio del Quirinale, una de las tres residencias oficiales del presidente de la Republica italiana.
Tras coger fuerzas, emprendimos la subida hacia la plaza de la Republica, pero antes hicimos dos paradas en el camino; la primera en el Palazzo delle Esposizioni y la segunda en la Chiesa di San Paolo entro le Mura. Esta iglesia fue la primera iglesia no cristiana, construida en la ciudad de Roma.
Subiendo la calle, llegamos por fin a la Piazza de la Republica, en la que su fuente se encontraba en obras de restauración. Al fondo, la Chiesa di Santa Maria degli Angeli.
Viendo que íbamos de tiempo mejor de lo esperado, decidimos acercarnos a la Fontana de Trevi, y es que esta bonita fuente merece ser vista tanto de día como de noche. La mayor fuente monumental de Roma es espectacular, tanto por su tamaño, su calidad ornamental y por supuesto, por el tamaño de su fuente, donde millones de personas al año lanzan una moneda, como deseo de su vuelta a la ciudad eterna en el futuro. Nosotros no íbamos a ser menos, esperando que se cumpla y poder volver pronto a esta bonita ciudad. (ACTUALIZACIÓN 2016: tuvimos la suerte de poder volver a los dos meses, así que parece ser que el deseo de volver a la ciudad se cumple)
Se nota que estamos en Roma, ya que a la vuelta de cualquier esquina te encuentras más y más iglesias. Así pues, retomamos nuestro camino, pasando por la Chiesa di Sant Andrea al Quirinale y la Chiesa di San Carlo alle Queattro Fontane. Esta última iglesia recibe este nombre ya que se encuentra en el cruce de dos calles, donde en cada esquina hay una fuente.
Seguimos nuestro camino, pasando por la fontana del aqua felice y haciendo nuestra siguiente parada en la Chiesa di santa maría della Vittoria. En el interior, destaca el Éxtasis Santa Teresa. Esta bella escultura de mármol de Bernini, restaurada recientemente, es también conocida por su aparición en la película de El Código da Vinci.
Muy cerca de la iglesia de Santa Maria, está la Piazza Barberini con la fontana del Tritone en medio de la plaza, obra de Bernini. Continuamos nuestro recorrido ya con el atardecer echándose encima, hacia los Jardines del Pincio. Un bonito lugar para pasear y disfrutar de unas bonitas vistas.
Bajando la cuesta, llegaréis a la plaza del Popolo. Lo que más os llamará la atención en esta plaza es el gran obelisco egipcio dedicado a Ramses II. En esta misma plaza encontramos también la Basílica de Santa María del Popolo junto a una de las puertas de la antigua Roma. Al otro lado de la plaza, se encuentran las iglesias gemelas, Santa Maria dei Miracoli y Santa Maria en Montisanto.
Cogiendo Via Babuino, llegamos a la Piazza di Spagna, llamada así porque en ella se encuentra la Embajada española ante la Santa Sede. Si por algo esta caracterizada la plaza, es por su Fontana della Barcacia en el centro y por su enorme escalinata con 135 escalones. Nosotros, salimos algo decepcionados porque nos la encontramos en obras… Tras una corta pero intensa subida, la Iglesia de la Trinita dei Monti corona la cima, y como no, estaba también en obras!! Aun así la subida merece la pena, ya que las vistas sobre Roma atardeciendo, es algo que no os podéis perder.
Frente a la Embajada Española, un enorme árbol de navidad con un grupo tocando villancicos, inundaba la plaza de ambiente navideño, un magnifico final para despedirnos de la plaza.
La noche ya había caído en Roma y solamente eran las 5 y media!! Pero como en todos nuestros viajes, no nos podemos ir sin ver algunos de los monumentos más característicos iluminados.
Así pues, llegamos a Piazza Colonna, donde se encuentra la Columna de Marco Aurelio. Construida en su honor sobre 176 para celebrar su victorias sobre Germanos y Sármatas en la batalla del Danubio. No muy lejos, esta la Piazza di Pietra, que alberga las 12 columnas de la fachada del Templo de Adriano.
Callejeando llegamos al Panteón, del cual os hablaremos en post posteriores. Sin duda, cambia mucho la luz que entra por el gran óculo al anochecer y con la luz del día. Si podéis, os recomendamos que lo visitéis con la luz del día.
En la parte posterior del Panteón, se llega a la Plaza della Minerva, con un obelisco sujetado por el Elefantino, obra de Bernini. y con la Chiesa di Santa Maria Sopra Minerva.
Nuestra ultima parada del largo día, es la Fontana de Trevi. Si de día es bonita, de noche es una visita imprescindible. Con una iluminación espectacular que realza aun mas la belleza de esta fuente. No es para menos la cantidad de turistas que abarrotaban los alrededores, haciéndo casi imposible fotografiarla. Ademas, se realizan juegos de luces, que dan al monumento unos tonos especiales.
Con una de las mejores vistas de Roma, y tras un duro día, volvemos al hostal para descansar y reponer fuerzas. Al día siguiente nos espera un buen madrugón para visitar la Ciudad del Vaticano.
3 comentarios de “Visitando la Roma monumental”